Te fuiste de mi lado y se desvaneció la vida. Se apagó mi luz, se moría el alba, y en la oscuridad las lágrimas brotaban, incontroladas. El alma se rompía, errante y enmudecida, absurda y vacía. Cada noche te recuerdo y me perdono cada día, por no olvidarte, por no dejarte, alimentando así, mi agonía. ¿Cómo hacerlo, dime, si aunque
Van cayendo las barreras con el mundo en pausa. Vamos desnudando el alma, buceando en las entrañas… y está pasando, que nos acercamos más a lo esencial. Cuando sirve de poco o nada lo superfluo, está aflorando la sensibilidad de los que se encuentran. Surgen sentimientos más puros, más valientes, más suaves, que nos hacen sentir extraños, distintos, vulnerables. Y
Sea por lo que sea, venga de donde venga, ha sacudido al mundo. Nos ha sacudido a todos, esta vez. Una fuerte sacudida que remueve por dentro, que nos deja hundidos, atónitos, extraños… que nos hace pensar, entre un cúmulo de información y de sentimientos revueltos. Pone de manifiesto el valor de las pequeñas cosas, la fortuna de poder disfrutar
No puedo dejar de escuchar #ELDISCO, de http://alejandro sanz, maestro entre los maestros. Y entre tanto talento me pierdo con Los lugares… fascinante combinación de pasión en su letra y música. Os dejo el enlace de esta magnífica canción para que los que aun no os habéis cruzado con ella. Me encanta que la descubráis conmigo. ¿Qué os parece? https://youtu.be/gl1c05zvaU8
Me interesa el alma de la gente. Me pregunto qué pasa con el equilibrio, si lograrlo nos suma o nos resta, controlando lo que sentimos. ¿A quién deberíamos hacer caso, a la cabeza o al corazón? Yo tengo mi clarísima preferencia… ¿Y tú?
Hay canciones que siempre, SIEMPRE, me van a gustar y a inspirar… Os paso el link de una preciosa canción cargada de sensibilidad que he recuperado de mi memoria con dos voces extraordinarias. I finally found someone Barbara Streisand y Bryan Adams
Una hora de silencio, cuando la soledad habla, sin voz, escribiendo. Cuando todo está dormido, está la esencia sintiendo. Es la hora el poeta, cuando yo respiro, cuando toman fuerza y vida la combinación de sus letras, cuando yo deliro, escribiéndolas. Una hora de grandeza, cuando el alma se despoja de sus miedos y revela sus secretos, intensos
Uno tiene días, y días. Y hoy es uno de aquellos en los que voy caminando por la calle y no sé ni adónde voy. Estoy con las energías revueltas y me he dejado la coraza entre las sábanas. Hoy no la necesito, mejor dicho, no he tenido ni ganas de ponérmela… un día en el que la melancolía me